martes, 13 de enero de 2009

tal cual como en una pesadilla bien elaborada
una realidad o fantasía incomprensible
todo es bastante tétrico, oscuro y tenebroso
pareciera que cualquier ruido es sospechoso de algo malévolo
el oscuro y nebuloso lugar me impiden ver más allá de mis párpados
trato de encaminarme hacia la nada
hasta que el silencio antes de la tormenta es inminente
y... ¡comienza la cacería!

ahí estoy corriendo desesperado y me doy cuenta que casi desnudo
pisando algo mas que tierra, restos humanos,
como la peor de las batallas campales...
rostros desfigurados, cuerpos mutilados, entrañas regadas al campo

sigo corriendo y el mismísimo señor de las tinieblas
es el que me sigue, como cual gato juguetea con su presa
antes de matarle...

sigo en mi angustiosa y desenfrenada carrera por darle fin!
pero un abrupto acantilado me frena
impactante es el mar de almas suplicantes por piedad
cuando las carcajadas siniestras me desolan en el apocalíptico escenario

cuando me inclino para aceptar la realidad
me someto a mirar mi destino como el de los que yacen rociados a mi alrededor
gritando que acabe de una buena vez al desalmado señor de las sombras
el despertar agitado y confuso me recuerdan que sólo debo esperar...
para someterme en la próxima noche a sus sádicos juegos en mis sueños